La urdimbre y trama de color guinda son de lana de oveja hilada a mano con malacate, de un cabo, teñida con grana cochinilla; la urdimbre y la trama blanca son de hilo industrial de algodón, de dos cabos. La bolsa fue tejida en telar de cintura en ligamento de tela doble. Los cabos de la urdimbre forman presillas trenzadas de cuatro cadejos. La cinta consta de los mismos materiales de la bolsa, tejida en ligamento de urdimbre transpuesta para formar el diseño de ojillos.

La tradición de tejer “costales” de boda como este ejemplo se mantuvo en Cañada de Yáñez hasta mediados del siglo pasado, cuando ya se había olvidado en comunidades vecinas. Además de esforzarse por lograr tejidos de alta calidad con hermosos diseños, las artistas de la comunidad se negaron a adoptar los colorantes rojos sintéticos fugaces que se difundieron por todo el continente en la segunda mitad del siglo XIX; los tenderos del pueblo solicitaban envíos de grana por correo desde Oaxaca, antes de que cesara por completo su producción hacia 1960.